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3 vecinos nos muestran sus terrazas soleadas con quincho en pleno Palermo

LA NACIÓN | Revista Living



— En Palermo Viejo, el Estudio Abramzon creó el edificio Pont Bleu, que cautivó a estos tres vecinos con terrazas amplias para disfrutar todo el año y gloriosas vistas de la ciudad.

"El edificio se construyó retirado para evitar el impacto de la altura sobre la vereda y asimilarse a la esencia del barrio", cuenta el arq. Diego Abramzon, del Estudio Abramzon. Foto: Daniel Karp

Claudio


Que la terraza sea como una casa de fin de semana, pero en pleno barrio de Palermo: con quincho, pasto, pileta, parrilla y lugar para estar. Esa fue la consigna que recibió –y cumplió a rajatabla– el arquitecto Guido Cammilli, del estudio Chausovsky-Cammilli para esta terraza moderna con una irresistible superficie de césped. Con todo el confort de una casa, e increíbles vistas abiertas que –con buen tiempo– permiten ver hasta el río, aquí dan ganas de quedarse las cuatro estaciones.


En el comedor, mesa enchapada a medida, cesta de ratán (Claudia Adorno) y sillas ‘Chistera’ con patas de madera y asientos de hierro (Roche Bobois). El arquitecto Guido Cammilli, artífice del espacio. Crédito: Daniel Karp

Claudio, dueño de casa, es de esas personas que, a fuerza de haber conocido luces y sombras, sabe valorar cada instante de la vida; y este departamento le llegó en el momento justo, por varios motivos: queda cerca de la casa de su novia desde hace siete años y, en el espacio de la terraza, encontró el lugar ideal para recibir y agasajar a sus nietos (su prioridad número uno en el mundo), sus hijos, su pareja y amigos. Inquieto, curioso, sabio, pero sobre todo muy seguro de lo que quiere y lo que hace, definió cada uno de los detalles de su departamento y también de la planta alta, que tiene todas las comodidades de una casa de fin de semana, pero en medio de la ciudad.


Con estructura de hierro y sin columnas en las esquinas, el quincho tiene amplios ventanales con vidrios de seguridad y antirrayos (Blindex Solar). El piso se revistió con Travertino "Reverso" (SBG). Crédito: Daniel Karp

En uno de los extremos, mesada de granito negro absoluto y alzada de granito con terminación "Leather". Muebles de madera enchapada negra con lavavajilla panelable.


Parte de la terraza se ilumina gracias a una celda solar, y cuenta con un sistema de riego automático, para no derrochar ni tiempo ni agua. Crédito: Daniel Karp

En la espectacular terraza verde (Greentec), esculturas traídas de un viaje. Atrás, la escalera que lleva hacia la pileta, revestida en Travertino sin taponar para que la superficie sea más rugosa. Tiene jets de hidromasaje, luces interiores de led en colores, cascada y colector solar para templar el agua y prolongar el uso. Para extender la protección sin perder la vista, arriba de las barandas se colocaron placas de vidrio templado.


La instalación de la terraza verde obligó a elevar el nivel del quincho unos 20 cm. Crédito: Daniel Karp

Para evitar riesgos de filtraciones, las múltiples capas que requiere el techo verde se aplicaron a toda la superficie de la terraza, incluidos el quincho y la pileta

Arq. Guido Cammilli



En el quincho, ajedrez de cristal traído de Miami, reloj, recuerdo de un viaje y scultura hecha por una amiga del dueño de casa. Crédito: Daniel Karp

Uno de los pedidos innegociables de Claudio fue que se pudiera ver el interior de la pileta desde el quincho. Se logró con una pared de acrílico.

El sector de descanso del quincho está organizado con un sofá de tres cuerpos y sillones individuales (Missura) y mesa baja de vidrio triangular con líneas curvas diseñada por el dueño de casa (Steel & Glass).


En la pared, escultura inspirada en la fotografía “Almuerzo en la cima de un rascacielos”, de Charles C. Ebbets, y lámina por detrás. Crédito: Daniel Karp

"Originalmente, el departamento tenía la cocina y el comedor diario separados del living, y dos dormitorios chicos. Decidimos hacer un gran ambiente integrado (que abrió la vista hacia la ventana) y un único dormitorio con vestidor".

En el living, sofá de tres cuerpos (Missura), sillones individuales (Gris Dimensión), mesa de vidrio y alfombras, compradas en Punta del Este. Además, estantería de vidrio (Steel & Glass). Sobre la mesa, globo terráqueo y esfera de cristal traídas de viajes. Escultura "Mariposas" (Henry Alviar); y figura de pantera (Lalique). Por su parte, las cortinas son roller (Riel Americano) y los pisos, ‘Legno Life Oak’ (SBG).


La placa blanca se agregó después de que el dueño de casa quedara fascinado con este original reloj negro.El mueble contiene por un lado los hornos, mientras que por el otro es biblioteca y lugar de guardado. Crédito: Daniel Karp

La cocina se planteó en un sobrio y atractivo juego blanco y negro. El dueño de casa pidió que la mesa alta fuera lo suficientemente alta como para desplegar dos diarios La Nación. Crédito: Daniel Karp

La vajilla de Claudio fue acompañada con servilletas de algodón e individuales grises (Claudia Adorno). La mesada es color negro absoluto (Dekton) con alzada de granito con terminación "Leather". Además, alacena con puertas push y bajomesada con cajones de mira telescópica y banquina revestida en acero inoxidable. Completan exprimidor, tostadora (Bugatti) y banquetas ‘Master’ (Kartell).



Gabriela


Siguiendo el estilo despojado de su departamento, esta terraza fue proyectada por elEstudio KG Arq como una caja sintética que aprovechara tanto la superficie cubierta como la descubierta.


Sobre la mesa, cesta de ratán, mantel a rayas grises y blancas, y servilletas de algodón (Claudia Adorno). Crédito: Daniel Karp

A Gabriela le llegó por mail la noticia de que se empezaba a construir el complejo Pont Bleu y le dio curiosidad conocerlo. Cuando vieron las dimensiones de la terraza, tanto ella como su marido se entusiasmaron: ideal para que sus hijos disfrutaran y para recibir amigos. Enseguida, puso el proyecto en las mejores manos: sus cuñados Ariel y Nicolás Kitay, quienes comparten la dirección del Estudio KG Arq con Alan Griscan. Con años de conocerse, ellos supieron interpretar las necesidades de la familia y estuvieron a cargo tanto de las modificaciones como del interiorismo.


En el quincho se destacan dos mesas de madera de guayubira con base de planchuela de hierro y los bancos del mismo material, con una presencia y un peso contundentes. Crédito: Daniel Karp

Detrás de la barra con mesada Silestone y bacha, se encuentra la parrilla, totalmente oculta por paneles de chapa.El piso de porcelanato símil madera (SBG) es el mismo adentro y afuera, para darle continuidad al espacio. La carpintería de aluminio (Aluar A40) es corrediza y se empotra completamente en la pared.


La estructura que rodea a la pileta es de hierro con alambre galvanizado. Los bordes, los escalones y el piso son de listones atérmicos. Crédito: Daniel Karp
La pileta estaba proyectada paralela a la ventana del quincho. La llevamos a uno de los extremos de la terraza porque allí recibe más horas de sol, se aprovecha mejor el espacio y es más seguro

Arq. Ariel Kitay, del Estudio KG Arq.



En el interior, las paredes se aprovecharon para generar espacios de guardado con puertas push. Al lado de la pileta y en altura se montó un deck atérmico (Castelatto), que recibe sol varias horas al día y tiene una vista maravillosa.


En el deck, sillones ‘Acapulco’ (La Mersa), manta tejida en telar (Elementos Argentinos), y mesa con tapa de mármol y base de hierro (realizada por KG Arq). Crédito: Daniel Karp

En el sector del living, sillón de tres cuerpos, sillas bajas, tapete y repisa angosta para cuadros, todo traído de la casa anterior. Además, mesas redondas (realizadas por KG Arq). Crédito: Daniel Karp

Con ventanales de piso a techo, la luz se suaviza gracias a las cortinas roller con motor. Crédito: Daniel Karp

Las luces con riel permiten crear distintos climas. En el área del comedor, sillas ‘Eames’. Mesa con patas de hierro y tapa de mármol (KG Arq). Lámparas colgantes con pantallas de malla metálica y macetas con suculentas. Los pisos originales, que eran beige, se cambiaron por porcelanato rectificado símil cemento alisado (SBG).


Otra de las modificaciones que realizó el Estudio KG fue integrar la cocina y el living, que comparten el mismo piso para destacar la continuidad. Crédito: Daniel Karp

Delimitan el living dos aparadores con estructura de hierro y frente con puertas y cajones de roble macizo (KG Arq). Además de aportar calidez, uno de ellos cumple la función de cubrir una columna.


El arq. Ariel Kitay. En la cocina, alacena y bajomesada termoformados con puertas push y mesada de Silestone. Crédito: Daniel Karp

Fabiana y Mario


Disfrutan siendo anfitriones. Su casa, de puertas abiertas, suele ser un ir y venir de gente durante los fines de semana. Por eso, le pidieron al arquitecto Guido Cammilli (también autor de la obra del primer vecino), que la terraza fuera el punto de encuentro cuando hacen reuniones con familia, amigos de la pareja y de sus dos hijos adolescentes. Con ideas muy claras, pensaron una ambientación fabril con toques más cálidos de madera y detalles masculinos para el quincho, donde se destaca, como punto fuerte, una gran parrilla en la que Mario despliega sus saberes de asador.


El área del living está definida por el revestimiento en madera. Allí se sumó un mueble para la tele de Jonathan Olivares. Crédito: Daniel Karp

Para la familia, esta es una segunda vuelta al barrio. Había vivido cerca de la que hoy es su casa y luego se mudó a un tríplex en Boedo. Cando Fabiana y Mario se enteraron de la construcción de este nuevo complejo, vieron la oportunidad de regresar a Palermo, donde sus hijos van al colegio. Valientes y pacientes, se mudaron en plena obra y vivieron casi un año mientras trabajaban los albañiles.


En el centro, la mesa tiene una caja de chapa para poner hielo y mantener bebidas frescas. Crédito: Daniel Karp

Siendo una familia de cuatro, y con un perro que se mueve con total libertad, integraron dos departamentos asegurando comodidad para todos. Al igual que sus vecinos, pusieron énfasis en el diseño de la terraza, pero aún no se decidieron a hacer la pileta. De todas formas, es uno de los lugares que más usan. En invierno, pasan tiempo en el quincho y, en verano, a partir del atardecer, es el lugar elegido por todos para tomar algo fresco y contemplar las vistas de la ciudad. Lo que funciona todo el año es la espectacular parrilla de Mario

Los dueños de casa querían darle al quincho un estilo fábril con algunos toques rústicos. Por eso, optaron por revestir una de las paredes con chapa.

En el sector del comedor se impone una contundente mesa para 12 con estructura de hierro, ruedas y tapa de lapacho (Jonathan Olivares), que tuvieron que hacer en el lugar por su peso y dimensiones. Acompañan sillas ‘Tólix’ altas (Landmark). Por su parte, los pisos son de porcelanato símil oxidado (Blaisten).


Pintar del tono que vemos en el techo fue propuesta de Mario, quien desde el principio tuvo ideas muy claras sobre lo que quería para el quincho y la terraza. Crédito: Daniel Karp

La barra de mármol con frente de madera marca el comienzo del espacio de la parrilla. Arriba, tres lámparas colgantes con bombitas de filamento. A los costados de la parrilla, mesadas de granito con alzadas de azulejos ‘Subway’ y pastina negra, que acentúa el estilo fabril de ese sector. El vajillero se hizo con madera de demolición (Jonathan Olivares).


A la izq., el arq. Guido Cammilli. A la der., terraza con mesa, sillones y reposeras ‘Rattan’ (Ars) Crédito: Daniel Kar

El toque verde lo dan las plantas en macetas de fibrocemento con sistema de riego automático. Crédito: Daniel Karp

Con orientación hacia el oeste, la terraza tiene vistas increíbles y también recibe sol varias horas al día. Juntarse a tomar algo al atardecer ya es un ritual familiar. En su superficie, se aplicaron aislantes acústicos y térmicos de espuma de poliuretano para reducir el impacto del sol y los ruidos en el departamento.

A diferencia de la línea rústica e informal del quincho, el departamento tiene un estilo moderno y elegante.


Las cortinas negras (Hunter Douglas) frenan el reflejo del sol, que pega fuerte sobre todo a la tarde. Crédito: Daniel Karp

En el comedor, mesa con base de hierro y tapa de cristal (Missura), sillas ‘Euro’ (CDI) y lámpara ‘Colgante Cuadrado’ de led (Alvar). Crédito: Daniel Karp

De un lado de la puerta que da a la cocina, dos vajilleros de metal (Landmark); del otro, sobre la pared gris, una selección de fotos en blanco y negro tomadas por el dueño de casa en viajes familiares. Cada baldosa del piso de porcelanato italiano (SBG) tiene un diseño diferente. En el living, sillón habano (Walmer) con almohadones color turquesa, sillón individual escandinavo retapizado (Mercado de Pulgas), y mesa baja con base de metal y tapa de vidrio (Landmark).


En la cocina, dos muebles efrentados de melamina enchapada, terminaciones de acero inoxidable y cajones con sistema Blumotion. Crédito: Daniel Karp

A la cocina, lugar de encuentro familiar, se accede desde el hall de entrada y desde el comedor. Los bajomesadas son lisos y las alacenas texturadas. La mesada es de mármol con terminación leather (todo de Johnson Acero). En el comedor diario, mueble similar al de la cocina. Mesa con base de madera y tapa de vidrio y sillas haciendo juego (Simet), lámpara (Alvar) y cortina americana (Hunter Douglas).


Por: Viviana Álvarez y Arq. Eugenia Cides



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